La Confederación Española de Familias de Personas Sordas-FIAPAS y la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) formalizan mediante un convenio de colaboración su interés compartido en la mejora de la calidad de vida de las personas mayores, para que éstas mantengan una vida activa y saludable. Con este fin reforzarán su interlocución con los poderes públicos y actores sociales implicados.
Madrid, 9 de julio de 2024.- La Confederación Española de Familias de Personas Sordas-FIAPAS y la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) han formalizado su colaboración a través de un convenio con el que reforzarán su interlocución con los poderes públicos y actores sociales. En el centro se sitúan las necesidades específicas de las personas mayores, grupo poblacional con una elevada prevalencia de sordera[1], la promoción de su participación y la consecución de una vida activa, mientras se generan respuestas adecuadas para que las personas mayores con sordera puedan ejercer sus derechos en igualdad de condiciones, sin discriminación alguna por razón de discapacidad y/o edad.
Con este convenio, tanto FIAPAS como la PMP se comprometen a respaldarse mutuamente en labores de incidencia política convergente en la promoción y defensa de los derechos de las personas mayores en relación con la salud auditiva y la accesibilidad auditiva, a la información y a la comunicación en el entorno, así como para desarrollar conjuntamente actividades formativas e informativas y otras actuaciones de sensibilización y toma de conciencia. Ambas entidades consideran que la firma de este convenio cristaliza una sinergia que les permitirá avanzar en su objetivo común de promoción de los derechos y el bienestar de las personas mayores con sordera, en el marco de las diferentes naturalezas de sus movimientos asociativos.
A partir de este momento, la Confederación Española de Familias de Personas Sordas-FIAPAS y la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) impulsarán la visibilidad de las personas mayores con sordera y sus familias, para evitar que el desconocimiento que consideran que impregna las políticas públicas sobre esta materia, se traduzca en una inacción o reacción tardía para la prevención, diagnóstico precoz y tratamiento eficaz de la sordera en las personas mayores.
[1] Según datos de la Sociedad Española de Otorrinolaringología (SEORL), la presbiacusia (consecuencia del envejecimiento del sistema auditivo) afecta aproximadamente al 30 % de la población general entre 65-70 años, alcanzando al 80 % de la población por encima de los 75. Debido a la contaminación acústica y al estilo de vida, la SEORL advierte además que se está provocando un incremento de estos problemas de audición propios de la edad en otras más precoces, en torno a los 50 años.